Si que es cool ser aquella mezcla rara entre comunista socialista y burgués renovado, eso te permite vestir lujosos trapos y pertenecer a los círculos más chicks, siempre con ese discurso irreverente y desenfrenado, opositor a la autoridad, en resumen care palo frente al mundo, pero con estilo.
Así tenemos estos nuevos próceres e hijos ilustres de la progresía, que de lunes a viernes (hasta las 14 horas) son del pueblo, que incluso hasta le hablan con cierta imperfección premeditada para caer mejor y que luego del almuerzo del viernes hasta las 24 del domingo son divos del jet set criollo.
Por citar unos cuantos, le tenemos desde políticos como el cineasta Marco Henríquez o el loco como le dicen sus amigos, hasta animadores como el poderoso Segei Lagos. Le tenemos farandulistas opinólogos como René Naranjo; cantantes como mi amiga que aunque ella no lo haría está a favor del aborto, doña Denisse Malebrán; y la lista es larga.
Próceres de la progresía estos chilensis súper cool de corte intelectual.
Qué pensarán cuando se encuentran bajo los neones y las estrodoscópicas, inmersos en música de métricas indescifrables proyectadas por mega parlantes. ¿Les seguirá sentando aquel discurso populista y sensacionalista?.
También los hay de esos que no buscan fama, sino que se van directo al billete. Así, les tenimos gerentes, emprendedores, altos ejecutivos, intelectuales, abogados, médicos, profesionales varios cuyo calzado italiano lo lucen magníficamente lustrado, sobre los grises pedales de un Porshe o de un Audi y no es que - salvo el doble discurso y aquella sensación bkn de ser revolucionario - tenga algo de malo.
Juventud Muna
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